Ubicada en una colina en un campo de Areco, esta matera y monturero de unos 60 M2 cubiertos se constituye como un volumen simple de revestimiento de siding vertical coronado por una cubierta a 2 aguas de chapa y rodeado en sus caras norte y oeste por una amplia galería de casi 4 m de profundidad. El interior se conforma de un espacio de estar y cocina que hace las veces de matera y monturero. Los únicos espacios cerrados son un área de guardado y un baño con una amplia ventana en lugar de espejo para sentirse bien en el campo. Un espacio ideal para descansar de la aventura y las cabalgatas con un buen mate al atardecer.